AJAAJAJAJAJA. OH CRUD, ME OLVIDÉ QUE TENÍA ESTO EN EL FORO.
Sorry.
Bueno, parece que os gusta. Em... siento muchísimo la tardanza, de verdad. Tenía intención de publicar la semana pasada, pero se me han cruzado muchos los cables y... como también tengo otro fanfic en publicación y lo voy poniendo cada dos semanas... creo que eso lo explica, ¿no?
Aaaaanyway. Gracias por vuestros memes, vuestros comentarios, y ahora voy a poner el segundo. Este ya lo he escrito yo sola porque mi compa andaba indispuesta y bueno, me dejé llevar un poco por mi odio a los romances. So. Yeah. [?]
Ah. Sí. Este es el penúltimo cap BTW.
Cheerio~!
Capítulo 2
Inserta Nombre de la Noche Azabache Lucarita Charizadita XY su charizard es chico enamorada enamorado Guaperas Helmintong, ahora guapo más que jamás.
Advertencia: Alto contenido en números. No leer si eres matematicofóbico [?]
Desde aquel beso todo cambió. Guaperas Helmintong ya no era tan rudo como antes. Tras ese beso se volvió más perfecto, menos malhumorado, más atractivo. Su pelo castaño pasó a ser pelo rubio, y sus ojos, también se volvieron azules, igual que Inserta. Ciertamente, la chica era especial a más no poder. Decidieron emprender su aventura juntos, dormir juntos, vencer a los líderes de gimnasio de la región Absurlándia juntos, besarse juntos, cogerse de la mano juntos, intercambiar pokémon juntos, cenar juntos, abrazarse juntos... muchos lectores imaginarán lo que harán.
Sus equipos eran:
Inserta: Lucario nv. 3400, Charizard nv. 239, Magikarp nv 732 (Con fisura, guillotina, frío polar y telepata, todos con infinitos pp), Arceus nv GOD (Porque, ya saben, es Dios) con tabla todos-los-tipos, Garchomp nv 559, Skitty nv ADORABLE
Guaperas: Weedle nv. 3, Venusaur nv 45, Pidgey nv. 3, Purrloin nv 24, Feebas nv. 26, Bidoof nv. -400
Tras pasar JUNTOS el sexto gimnasio, decidieron entonces probar los concursos. Una participación por donde los pokémon más fabulosos podían exhibirse con exuberantes movimientos de gran belleza descritas por jueces que no sabían nada más que decir “es fabuloso, fastidiosamente fabuloso, me ha encantado”. Ellos fueron al estadio de Ciudad Ledybaesunamariquita y llenaron sus folletos sujetando los dos el mismo bolígrafo. Juntos. Normalmente no admitirían a una pareja participar como un equipo en una modalidad doble, pero JUNTOS se veían adorables. Tanto que hasta les dio diez puntos de ventaja entre todos los concursantes. Nadie que se percatara del otorgo de ese privilegio se quejó.
El concurso empezó. El primer concursante era Gary Oak, el mejor coordinador de la historia, campeón de las ligas mayores de aquel año. ¿Quién dijo que fue líder de gimnasio y campeón de la liga? ¡Malinformadores! ¡Eso nunca pasó! El nieto del profesor que sufrió varios robos usó a Blastoise y Electrivire para crear un maravilloso torbellino de agua mezclado con electricidad. El público aplaudió con mucho entusiasmo. La puntuación era algo medio-alta. 76. 64 por exhibición +12 por ser famoso.
Luego llegó una entrenadora que quería probar esta historia de los concursos. La gente no sabía quién era. Ella pensaba que su vestimenta, su gabardina violeta y su gorro la hacían sublime, pero no escuchó ningún comentario acerca de ello. Nadie la aplaudía.
Entonces lanzó dos pokéballs al aire, sacando a un unzefant con sombrero y un umbreon con facciones de Kyubey.
—Le repito que entrar en esta historia es malo para su psique, mi señora.— Le dijo mediante telepatía su umbreon mentalista.
—Kyu, por favor, estás rompiendo la cuarta pared...— Le reprochó su dueña.
—Poco importa. Se supone que esta no es nuestra historia.
—Todos los fanfics de pokémon que sean de Poisonbird son nuestras. Tenemos derecho a aparecer, duh.
—Y yo sigo pensando que es mala idea. Hasta ella lo piensa.
—Kyu... la gente está esperando.
Kyumbreon gruñó. Cargó un pulso umbrío y la energía expulsada fue moldeada con psíquico para formar dragones que subían arriba al cielo. El Unfezant se metió dentro del vórtice de los dragones y llegados a cierta altura, el faisán batió sus alas para usar aire afilado y así esparcir toda la oscuridad. Aunque era espectacular, nadie dijo “oh” animado. No. Solo aplaudieron. Su puntuación sería de 92, si no fuera por las siguientes restas:
—Ha usado oscuridad. Malvada. -10 puntos.
—No es famosa. -5 puntos.
—Imperfecta. -10 puntos.
—Love-hater -15 puntos
Quedando así una puntuación de 52. Ella se quedó completamente indignada.
—¿¡PERO QUÉ COÑO!? ¡Si fue fabuloso!
—Le dije que entrar en una parodia era malo para su estado mental.
No podía aguantar esa injusticia. Levantó el dedo corazón a todos y se retiró a las gradas.
Era la hora. La hora de lucir cuán buenos eran ambos. La pareja se presentó. Miles de aplausos fueron escuchados. Eran los trágicos amantes del Distrito 12. Y su exhibición sería simple. Inserta sacó a Skitty. Y Guaperas, a su Purrloin. Ambos eran hembra y macho, respectivamente, a la vez que gatos, así que no les hicieron falta ni movimientos.
Ambos se demostraron su amor. Ambos se dieron caricias mútuas con la cabeza mientras maullaban adorablemente. Muchos awwwwns se hicieron audibles. Y luego, aplaudieron emocionados. Fue una exhibición que haría que el mismo reglamento se cogiera una pistola y se pegara un tiro. La puntuación fue muy alta. La entrenadora de la gabardina estalló en un solo grito exagerado.
—¿¡QUÉEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE PUÑETAS SON ESOS NÚMEROS TAN ALTOS!?
Diez puntos por monería. Diez por usar a dos pokémon de la misma especie. Más veinte por ir cogidos de la mano. Más treinta por ofrecer alguna diversión a los espectadores. Y la puntuación era de 100…
180 puntos de 100.
Con esta puntuación todos los participantes quedaron descalificados, quedando así la pareja trigopelo ganadora.
—¡PERO QUÉ MIERDA ES ESTAAAAAAAAAAAAA!
—¡Oh, que bien, han ganado ellos, qué bonito!— Dijo una chica con ropas de Ranger. Era Selena que, según un hack, se retiró del ejercicio de entrenadora para dedicarse a los concursos. Nunca fue ranger. La de la gabardina tuvo un grandísimo mindfuck.
—¡HIJA DE-! ¿¡QUÉ HACES TÚ AQUÍ!?
—¿Qué? ¿Quién eres tú?
—¿Pero qué cuernos te han hecho? ¡Este mundo está loco! ¡LOCO DE REMATEEEEE!
Entonces tuve que aparecer yo para borrarle esos recientes recuerdos para poder usarla en historias más decentes. Al menos ya cumplió su función crítica. Es que es verdad... ese tío del Light Platinum no tiene ni puñetera idea. Fueron aclamados por todos, alabados por todos, adorados por todos... todos dijeron “hurra, hurra”, les dieron una suite de lujo e hicieron cosas inmencionables para un fanfic de categoría T.
Al día siguiente, los dos iban a la siguiente ciudad. Después de esa actuación, los dos mega-evolucionaron a mega-famosos de la muerte. Todos les pedían autógrafos, les pedía fotografías, les daban galletas, las cámaras les seguían... y con gusto manifestaban su amor frente las cámaras. Del modo inocente, claro está. La gente pateó a los pokémon salvajes que les aparecía por ellos. Incluso una limusina negra les llevó directos al séptimo gimnasio.
Pero antes de ganar la medalla de aquella región, había algo que tenían que superar... el mundo estaba entrando en crisis. El equipo Cazurro volvía a atacar.
El equipo Cazurro. Ese equipo que solo quería tener todos los legendarios del mundo para ninguna causa en concreto. Tan solo para que la gente le alabe y así prestarles el mundo tan tranquilamente. Y casi casi lo habían conseguido. Solo faltaba uno, y era el mismísimo Dios, que estaba recluido en la masterball del bolsillo de Inserta. Y ahí estaba. Se había encontrado con ellos cara a cara.
—Eh, “shiquilla”, nos han “disho” que “tiene” un “pokemonaso” en el “bolshillo” que flipas. ¿Te importaría “dárnozlo” “paa” que “podamo” “dominá” “er” mundo?
¡Sí, hombre! ¡Así por las buenas se la iban a dar! Directamente, Inserta sacó a Arceus y le ordenó que usara Setencia. Como tenía la tabla todos-los-tipos, cayeron meteoritos arco-iris desde el cielo y los mató. A todos. Eso sería asesinato, pero otra vez, estaba justificado porque era ella. Y porque ellos eran los malos. El equipo fue vencido una vez más. Pero alguien por detrás le dio un porrazo. Igual que Guaperas...
Inserta se despertó en una sala vacía. Estaba todo oscuro. No se veía ni al Caballero Oscuro entre las oscuras sombras. Se veía todo borroso. Y luego una voz se escuchó.
—Al fin te despiertas, Inserta... has estado arruinando nuestros planes, pero eso ya no va a pasar más.
Era el líder del Equipo Cazurro. Era Nerea Hierbajo Cremacamiseta Cubo De Rubick Harmonía, más conocido mundialmente como N. Él era un malvado. Todo lo contrario lo que dice Gamefreak. Ha estado enfrentándose a esta pareja, y ya los tenía atrapados.
—Gracias a tu alto nivel de pro, tenemos el último legendario Arceus y lo tenemos a nuestro control. ¡Al fin, los gobiernos nos cederán el reino!
—¿Pero esto no era una democracia?— Le preguntó Inserta.
—Será lo que yo digo, preciosa. Por cierto, me he enamorado de ti.
—Yo no te quiero.
—Me querrás.
—Mi amor es Guaperas.
—Seré yo por mi nombre Nerea Hierbajo Cremacamiseta Cubo De Rubick Harmonía. Y no me importa si eres especial. Yo también lo soy. Puedo hablar con los pokémon.
—¿Y puedes hacer ESTO?
De repente, sacó una navaja de Arceus sabe dónde y se cortó las cuerdas que la oprimían. No, miento, su mano era una navaja ahora. Ahora era un Bisharp. Ahora amenaza a N. Ahora le devuelve los pokémon y le regala todos los legendarios. El equipo se disuelve. Y entonces rescató a Guaperas y los dos vencieron la liga y al campeón. Y de pronto, como esta historia ha perdido todo el santo sentido, va un meteorito y se carga el planeta, pero Inserta lo salva. Pero cae un trozo de meteorito en la cabeza y se muere.
Fin.